Tuesday, September 04, 2012

VAN DRELL. El pintor de Tres Cantos


VAN DRELL
PINTOR DE PODEROSO TALENTO, TÉCNICA DEPURADA, SENSIBILIDAD EXQUISITA, GRAN INTUICIÓN PARA ORQUESTAR EL COLOR Y UN ESFUERZO TOTAL PARA DEPURAR EL AIRE.
SIMBOLISTA DE IMÁGENES SUGERENTES Y METÁFORAS QUE CONDUCEN AL ESPECTADOR A LAS PROFUNDIDADES, AL MISTERIO. LAS FIGURAS METAMORFOSEADAS QUE APARECEN EN SUS CUADROS, NO PIERDEN SU CONFIGURACIÓN HUMANA, PERO SE TRANSFORMAN EN SERES DISTINTOS, ENTREGADOS A EXTRAÑOS RITOS, A FANTÁSTICAS PROFESIONES.
LA PINTURA DE VAN DRELL, ESTA LLENA DE SAVIA MITILÓGICA, SON LOS SUEÑOS DE UNA MENTE GENIAL, DE UNA MANO PRODIGIOSA, QUE DIBUJA CON LA MISMA FACILIDAD QUE PIENSA. ( Crítica especializada )
Su vida.
Hablar de un genio, es meterse en un callejón sin salida, es adentrarse en una vida diferente, en un modo de interpretar la existencia, de otra manera. Por ello, este opúsculo serìa temerario, si, el intento, fuese conocer en profundidad un espíritu fuerte, que sostiene la obra siempre frágil, de una estructura humana y, que por designio de los hados llamaron Juan María Vendrell, nombre con el que le conocemos. Un artista imaginativo, que salta a través de los tiempos, para adentrarse en el mundo cósmico de lo universal, de lo etéreo, en busca de sus sueños, más allá, de aquello que, para el resto de los mortales, es infranqueable.
Un hombre honesto, sencillo, de pocas palabras, parco en expresión, que deja que sus creaciones hablen por él. Leal a si mismo y a sus amigos, siempre abiertas sus puertas al diálogo, escuchando con oido fino y mirada inteligente, transparente y directa, que transmite, a la vez, una inmensa calma. Su fortaleza esta en su obra, expresión íntima de un mundo que nos quiere transmitir, como si voltease la retina de sus ojos al firmamento ensoñador, mundo inexplorado, y quimera post mortal.
Nace, Juan María, el mayor de cinco hermanos, cuatro varones y una hembra, en Barcelona, el 25 de Mayo de 1921, en el domicilio de sus padres, calle Molas, cerca de la plaza de Cataluña; en él, trancurrieron los primeros años de su vida.
Por motivos de trabajo, sus padres Juan, abogado de rancia estirpe catalana, pués, el apellido Vendrell aparece ya, en el monasterio de San Cugat del Vallés, en el siglo XII, y Mercedes, también de raices catalanas, se trasladan al vecino país francés, avecindándose en la localidad de Toulouse; contaba Juan María seis años, y es, en ese mismo año de 1926, cuando ingresa en el colegio de Le Caousou.
Desde los primeros momentos, se rebela como un niño apasionado con el dibujo, motivo por el cual, los profesores recomiendan a su padre, D. Juan, que se incorpore a la Academia de dibujo y pintura, donde sus trabajos son galardonados con los primeros premios de su dilatada obra. Su padre fallece, en Toulouse, en Mayo de 1935, por ello, ya finalizados sus estudios, se traslada con el resto de la familia a España, contaba con quince años de edad, y traía ya consigo el Premio al diseño Le Caousou y la Medalla de Oro de pintura Le Caousou.
En la capital condal, con el objeto de ampliar sus estudios de dibujo, cursó estudios en las Escuelas Baixas, y de La Lonja.
Era evidente que la pintura no aportaba rendimientos económicos suficientes, siendo para él, en aquellos momentos, una forma de evasión, preparándose para ingresar en la Academia Naval de Barcelona, con el objeto de conseguir el título de Capitán de la Marina Mercante.
La vorágine bélica del 36, le obligó a incorporarse a filas y se vio inmerso, a la edad de 17 años, en la marea devastadora de aquella lucha entre hermanos. Cuando finalizó la contienda, reingresó a la Academia Naval, aunque nunca llegaría a ejercer su titularidad de marino mercante. Los años siguientes a la guerra, fueron difíciles, y la gente no disponía de dinero, vender cuadros era una empresa imposible; se dedicó, en su casa de Sepúlveda nº 187, a realizar ilustraciones a mano, de estilo inglés que estaban muy de moda.
Fue colaborador, durante bastantes años, y se inició como profesional, en la película de dibujos animados: "Garbancito de la Mancha", llamado a colaborar en el diseño de sus personajes por el director del film, y dibujante, Artur Moreno, y que, convirtió la obra en el primer largometraje de dibujos animados, de España y de Europa. En los estudios, que para su realización organizó, a base de grandes mesas de dibujo giratorias, intervinieron más de ochenta hombres, bajo la dirección de seis animadores, entre los que se encontraba Juan María Vendrell.
Dió vida al personaje principal, Garbancito, y a la Bruja Pelucha, así como a unos gusanitos, que cantaban en la obra, con música de fondo del maestro Guerrero. La distribución de la película corrió a cargo de la empresa Balet y Blay., y se extrenó, en el cine Fémina de Barcelona, el 23 de Noviembre de 1945. Sus diseños de 1945. Sus personajes figuraron en otros soportes: muñecos, cromos, libros etc. Cuando finalizó su trabajo con Artur Moreno, se dedicó a realizar ilustraciones para diversas editoriales.
El día 7 de Octubre, del año 1945, contrajo matrimonio con María Ángeles, natural de Sevilla, fiel colaboradora, y animadora de su obra, pasando a vivir el matrimonio a su nuevo domicilio, en la calle Tallers nº 69, de Barcelona.
Trabajando en los Estudios Rieusset S.A., sede de donde procede la primera peseta en papel moneda, en su primera emisión, recordada por su carabela en la cara posterior, le ofrecieron un puesto de diseñador en América. LLevado por su espíritu de aventura, prepara su viaje cuando ya había nacido, en 1947, su primera hija, María Dolores. Pero ese viaje nunca llegó a realizarse, consecuencia de haber caído el dinero del viaje en manos de un estafador.
Colaboró con el pintor Santamaría en Educación y Descanso, logrando perfeccionar su pintura, tanto en lo figurativo como al natural y bodegones, sin dejar de lado otros temas diversos.
Todo esto, fue suficiente como para que el matrimonio decidiese ir a probar fortuna fuera de Cataluña. Su suegro, que regentaba un almacén de hierros, en Sevilla, le encargó la dirección del negocio. En el año 1949, nace su segunda hija Mercedes. Durante los seis años en la capital hispalense, no dejó de pintar, y en el Salón de Primavera, expuso por primera vez, a título individual, consiguiendo el Premio Salón de Primavera de Sevilla. Conoció al escultor Illanes, su ferviente admirador, que le anima a presentar sus pinturas, ese mismo año de 1954, dando comienzo a la primera étapa de su obra o de REALISMO COSTUMBRISTA, que culminará en 1980, con la exposición en la Galería Alarcón, en la calle Mateos Gago.
La de Sevilla, fue su primera muestra, patrocinada por su gran amigo, profesor y poeta, D. Juan José de la Lastra y de Terry, vecino de Juan María Vendrell, en Alcalá de Guadaira, de ahí la serie de paisajes, realizadas por nuestro pintor, relacionados con esta localidad: "Torreones y matacanes", y " el castillo".
Cuando ahora se cumplen los cincuenta años de aquella exposición, es preceptivo hablar de la misma, pues fue la primera que nuestro artista expuso, a título individual, cuadros al óleo, dibujos a pluma y bocetos a carbón. Dos cartones referentes a quimeras, fruto de su profunda fantasía, se pudieron ver junto a otros, que realizó para las vidrieras de la catedral de Niza.
Sus dibujos a pluma hacían recordar ciertos trabajos preparatorios para ser elaborados a buril, entre los que destaca: "La vuelta de la cacería". los temas de venados como, "el ciervo acosado", "gato montés acorralado", o "luchando con el jabalí", de técnica cuidada, donde el artista reproduce luchas entre animales, escenas de cacería; en otros, escenas de pajaros y flores, reflejan sus grandes dotes de dibujante, y la influencia en los estudios pictóricos, en Alemania y Francia, se hace patente.
La factura daliniana se aprecia en el denominado, "Los cuatro jinetes del Apocalipsis", representación de una figura humana, situada en la superficie del globo terráqueo, sobre la que cae, como un largo dedo, con afilada uña que sale de una masa, en la que se diferencian formas monstruosas, en una atmósfera oscura. Con la misma técnica de ejecución, se realizaron: "Puck", "Blancanieves" y "Druida", y en donde la sugestión plástica se realiza con una intención manifiestamente expresionista, quizás realizados con la mirada puesta en las obras de El Bosco y Van Got, en el museo del Prado.
En 1955, decide Juan María Vendrell regresar de nuevo a Barcelona, llevado por la inquietud constante de buscar nuevas fronteras, se establece en la urbanización de Valldoreix, donde nace su tercer hijo Juan Antonio, exponiendo al poco tiempo sus nuevas obras, tanto en muestras individuales como colectivas; en 1956, lo hace en la Asociación de Dibujantes, ya con el seudónimo que le consagraría hasta la fecha, y que toma a partir de la exposición en Sevilla: VAN DRELL.
Pronto entra en contacto con la industria de grabados de estampación, LYONESA de tejidos de Lyon, donde estudia dibujo y grabado, dedicándose a la creación de originales y clichés, para posteriórmente colaborar con el pintor Modesto Cuixart, en los talleres de moldes y grabados, en Barcelona.
Su pasión era precisamente la creación y el diseño. Por ello, unida a su sagacidad y a la capacidad de organización empresarial, decidió, el año 1957, comprar a Cuixart esta industria de estampación, en la que llegó a tener, cerca de cincuenta operarios. Sus trabajos de serigrafiado eran muy apreciados en Francia, desde donde, en grandes cantidades, solicitaban sus diseños de estampación en seda y algodón. Fue una etapa de prosperidad económica para el artista.
Al mismo tiempo, su inquietud creadora se plasmó en una gran cantidad de lienzos, muy apreciados, que se expusieron en diversas galerias de Barcelona, y que corresponderían a la primera época pictórica de Juan María Vendrell.
La llegada de nuevos productos sintéticos, hicieron que decayeran los pedidos. La competencia hacía cada vez más costoso el sostenimiento de su industria, y se vió en la necesidad de cerrar, para buscar otros medios de subsistencia. Por ello, de nuevo la familia, tiene que hacer las maletas y llegar a un nuevo destino:El Sáhara.
Al poco de llegar a la costa occidental africana, le llega la información de que, desgraciádamente, la mayor parte de sus obras habian desaparecido en un incendio, que se produjo en casa de un amigo que los guardaba en Barcelona. De los que se salvaron, podemos citar: "Madre tierra", en poder de una de sus sobrinas; "Caronte", "paisaje de Monstserrat, y "paisaje de Alcalá de Guadaira", en poder de un hermano. Otros permanecen en manos privadas, desconocidos.
Una de aquellas obras, podemos recordarla gracias a una fotografía que conserva el pintor y que volvió a reproducir posteriormente; se trata de "los cuatro jinetes del Apocalípsis", y de la cual ya hemos hablado. Podemos recordar, de igual modo: "Vestal y muerdago".
Fue su suegro, D. Antonio Guerrero, quien le puso al frente del estanco - librería que había establecido en la capital del entonces Sáhara Occidental Español, pasando los cinco miembros de la familia a domicialiarse en El Aaiúm. No trancurrió mucho tiempo sin que le ofrecieran la dirección del departamento de organización de la empresa minera ENMINSA, posteriormente denominada, empresa FOSFATOS DE BU-CRAA, y finalmente FOSBUCRAA.
Fue nombrado consejero del primer Cabildo Provincial del Sahara, por el tercio industrial, y, durante cuatro años, estuvo ejerciendo el cargo de Agricultura y Ganadería, aunque, como el propio Vendrell dice: entre comillas lo de agricultura. Es obvio, que esta, brillaba por su ausencia. Tuvo la oportunidad de contactar con muchos de los jefes de tribus y hacer amigos entre las gentes indígenas estudiando sus costumbres y su idiosincrasia, sus contactos con la tribu "Erghibat", los recuerda especialmente. Con el Presidente del Cabildo El Jatri, entabló una noble amistad. En 1963 participó en el Certamen de Pintura de El Aaiún.
Estuvo muy introducido en el Ayuntamiento, siendo miembro de la directiva del casino cultural y socio del casino de oficiales, dedicándose, por todo ello, a las responsabilidades de su cargo, a la organización de diversos programas y actos, por lo que junto a la dificultad en conseguir material, su creación pictórica no fue muy extensa durante este tiempo.
Nuria, la menor de sus hijas, nace en el hospital del Aaiún, asistida por el pintor que hizo de comadrón, pues el único que asistía a los partos, estuvo la noche anterior de guardia y, no se encontraba presente, anécdota muy recordada y querida por Vendrell, Ese mismo año, con motivo de las fiestas de El Aaiún, en 1964, realizó al óleo "el Cadí de Smara", de gran virtuosismo técnico, que se refleja en el detalle de sus facciones, plasmando con un gran realismo la psicología del personaje.
En 1965, expone sus pinturas en el Concurso de Pintura Cabildo Provincial de El Aaiún, entre las que citaremos a "saharauis", o "gacelas", esta última, preside el salón de su domicilio actual. En 1966, "el zoco", donde intensifica la violencia celeste, provocando un gran contraste con el tono blanco de las casas saharauis.
En otras de sus obras, de caracter costumbrista tribal, nos muestra Van Drell, paisajes, rostros y escenas: "sacando agua"," joven saharaui", "bajada de la fuente", "tomando te", o "burros y niñas", entre otras. Realiza obras a pluma, como "salam" o "dos gacelas". pintado el mismo año en el que finalizaría su etapa en la parte occidental africana.
Algunas obras realizó a la acuarela, y, de las que el pintor guarda en gran estima figura, el el "triptico del camino de Smara", fruto de la observación y de la imaginación, donde el artista despues de recoger en boceto los apuntes de una jornada, nos muestra un "amanecer camino de Smara, hacia Oriente", con la montaña al fondo de Gor el Berh, en su primer trabajo. En el segundo un "mediodía", donde priman los colores, muy cálidos, al pie del Gor, y una "mirada hacia Occidente" en el último, donde destaca el cielo rojizo de la puesta de sol y dejando atrás el Gor, en visión ya muy lejana.
Los últimos años, vivieron en una casa muy confortable cedida por la Compañía Minera, y cuando ya se percibía, no obstante, una cierta inseguridad en la zona como consecuencia de la política, que se decantaba con la cesión de estos territorios a Marruecos, Vandrell, se plantea el abandono del Sáhara, antes de que fuese demasiado tarde para tomar decisiones, y a pesar de que no tenía la completa seguridad de que el trabajo de dirección de empresa que le ofrecían en Madrid, tuviese una viabilidad asegurada, el riesgo merecía la pena. Con toda su familia, se traslada a la capital de España, donde establecen su domicilio en la calle María de Guzmán nº 37.
Durante tres años y medio trabaja en las Industrias Plásticas del Centro (IN-PLA-CE), primero en el lugar primitivo cerca de General Ricardos, en la calle Matilde Díez, para pasar a dirigir, posteriórmente, una gran nave en el polígono industrial, Cobo Calleja, en la localidad de Fuenlabrada, y donde trabajaban del orden de sesenta a setenta operarios, cuya atención le resta el suficiente tiempo como para que deje un poco de lado sus inquietudes artísticas. Los trabajos realizado en estos tres años, quedaron en manos de familiares y amigos del pintor.
Debido a una serie de circunstancias relacionadas con el capital a invertir, la falta de cobertura económica de la empresas y otras circunstancias, decide Van Drell cambiar de aires, para retornar a sus origenes. Sabadell sería su nuevo destino, llega el año 1974, para dirigir una fábrica de construcción de maquinaria de acabado textil, FONTANET S.A., que daba trabajo a mas de ciento diez hombres.
Tuvieron su domicilio en la calle Convento nº 39, y durante este tiempo, obtiene un master de informática, a través de la empresa INFONET, y en consecuencia, el propietario de Fontanet, le aparta de la dirección, para encargarle un programa innovador con el fin de informatizar tanto la maquinaria, como la producción, almacén y mantenimiento. Programa que aunque finalizado, no quiso desarrollarlo Vendrell al estar en desacuerdo con algunas pautas de comportamiento de los hijos del propietario de la fábrica, debido a sus caprichos, y que llevaron posteriormente al cierre del negocio.
Antes de que esto sucediera, en el mes de Octubre de 1977, de nuevo, se pone en marcha Van Drell. Había aceptado una oferta de dirección en la empresa CONDEPOL, para la fabricación de telas de plásticos, rafia, sacos, cordelería, redes, etc., en Alcalá la Real de Jaén.
En esta localidad vuelve a retomar el arte, junto a Lola Montijano, Enrique Valverde, Sebastián Rosales, Pepe Sánchez y Antonio Campaña, para formar, en 1980, el grupo "ARPA" (Artistas Plásticos de Alcalá), dando comienzo la segunda etapa de Van Drell, o de EXPRESIONISMO.
Con una dedicación plena, desborda en él, un derroche de imaginación inconcebido, que le conduce a una serie de creatividades y deformaciones expresivas, dentro de las figuras humanas, en su lucha entre lo objetivo y lo subjetivo, dando lugar en alguna de sus obras al más puro surrealismo. Domina la forma, debido a su facilidad para el dibujo, jugando en serie de ritmos, equilibrio y compensaciones de masas, realizando sorprendentes giros de gran riqueza cromática, rasgos que se manifiestan, tanto en la exposición patrocinada por la Excelentísima Diputación Povincial de Granada, en 1981, dende se alza con el Primer Premio de Pintura "Gabriel Morcillo", en Córdoba con el Premio al certamen de la C. de Ahorros y M. de Piedad, en Martos Jaén (1982), con el Premio de Pintura de su Excelentísimo Ayuntamiento de Martos, en Alcalá la Real con la Medalla de Oro de la Galería Aleixandre, como en las exposiciones realizadas en Huelva, en la Galería del Ministerio de Cultura de Jaén (1982), o en la Galeria 16 de Madrid (1982).
En Alcalá la Real, la familia Vendrell, pasa a vivir al Paseo de los Álamos nº 3, y durante cerca de cinco años, vemos a Juan María como director en la fábrica Condepol, organizando el trabajo de mas de cuatrocientos hombres. En estas circunstancias le llega su jubilación, a los sesenta años y es el momento que inicia su plena dedicación a la creación pictórica.
Es ahora cuando decide dar el salto para exponer en la capital de España, entrando en contacto con la Galeria 16, de Diego de León 16, y del 12 al 30 de Enero muestra al público una treintena de óleos, entre los que cabe destacar: "ciencia infusa", "danzar locos"; "los cuatro jinetes del Apocalipsis" en rememoranza del de su primitiva obra desaoareceda en el incendio de Barcelona; "druida en Carnac", "linde de olivos" o "canto de Jaén", este último en una de las sedes de una de las agrupaciones políticas de la localidad. En estos momentos, sus pinturas se encuentran a medio camino entre el surrealismo y el realismo fantástico. No es dificil adivinar en ellas la honrosa raiz de ilustrador, donde, una vez más, refleja su dominio del dibujo y el profundo conocimiento que tiene del color, fiel así mismo, recrea en cada uno de sus lienzos un pedazo distinto del mundo onírico que bulle en su interior. Su pintura, a veces hiriente, barroca e inquietante, como una pesadilla de sueños infantiles, pasa en otras ocasiones a estar llena de belleza y de lirismo, pero en todas ellas se adivina la satisfacción interna del pintor. Van Drell, pinta para si mismo, para su gozo personal, sus sueños como continua diciendo Mario Antolín, al fin, estuvieron colgados en esta galería.
Interviene activamente en la vida social alcalaína, llegando a ser muy querido y respetado, incluso, por unanimidad, fue propuesto para alcalde, cosa que rechaza humíldemente; aliviado del trabajo profesional, ahora la pintura y su familia van a ser su principal preocupación. Nuria tenía que incorporarse a la Universidad, y su hija mayor María Dolores, en esos momentos en Venezuela, había comprado un piso en la sierra norte de Madrid, que cede a sus padres, haciéndose cargo de él.
Estas circunstancias, precipitaron su despedida de las gentes de Alcalá, para pasar a residir en Descubridores nº 10, del entonces complejo urbanístico madrileño de Tres Cantos, dependiente de Colmenar Viejo. Corrían los últimos meses del año 1982
Muy pronto, entra en contacto con el mundo cultural tricantino y colmenareño. Da comienzo a su tercera etapa artística, o de ONIRISMO FANTÁSTICO. Una de sus primeras muestras, llegado a Madrid, fue la expuesta en la sala 1 de la galeria Torres Begué, calle Fernán González 31. Su pintura, según Conchita Kindelán, extraña y seductora, junto a su temática, de algas, troncos y vegetación, a semejanzas de monstruos terrestres o marinos, donde la materia se expresa como escamas en las lineas del dibujo, bordea lunas o ruedas de fondo claro, azules, rosados o se convierten también en redondeados insectos, mezlándolos cual paisajes submarino, siluetas de mujer semejantes a sirenas, venus o duendecillos, lirios gigantes, mares con olas grandiosas, de cromática bella, y oscuridades en tonos pálidos algo nebulosos.
Por primera vez, expone el la Sala Picasso de Colmenar Viejo, en 1984, así como en el colegio Julio Pinto de Tres Cantos, coincidiendo con las Fiestas del municipio en ciernes y que, desde los primeros momentos, va a contar con la desinteresada participacion de Van Drell, en todo evento social.
De la muestra que presentó en Castellón, en 1986, diría la crítica: El artista pinta sus sueños, sean de tipo que sean, pinta de su imaginación y la simultánea definición plástica. La "caracola mecánica", "las espinas", "eurípteros", "fantasía gótica", extrañas rapaces celestes, maquinas sui generis, pinturas inmersas en extraños colores, nacarados, verdosos, rosados, de extraños reflejos, combinando la sugestión del empaste matérico con los matices de las capas más delgadas. Van Drell, es un surrealista integral, por su despreocupación ante un acabado bonito, a quien le interesa el proceso en la concrección del tema y su plasmación en el cuadro, es la fantasía más que el acabado del producto lo que busca. Es el surrealismo onírico, donde la textura, el color y el espacio, son sus rasgos más esenciales.
Van Drell, es un artista para la paz, su pintura de libertad imaginativa, nos empuja a la meditación, a la búsqueda de un mundo que queremos alcanzar, con un mensaje diferente, encaminando a reflexionar juntos delante de su obra, dejando abiertas las puertas de su alma, que cuelga por un días, en 1986, en la galería Infantas, en una muestra, junto con otros, bajo el denominador común de artistas para la paz.
En 1988, cuando comienza la 4ª etapa de su obra, con el SURREALISMO ONÍRICO, vuleve, de nuevo, a exponer en la sala Picasso, desde el 15 de abril al 8 de Mayo, para mostrar sus últimos trabajos, así como otra vez en la galeria Infantas de Madrid, dando a conocer una serie de figuras irreales, que campan por sus fueros, desafiando a las fuerzas de la naturaleza, con rotos, aberturas, rugosidades en las diferentes capas que conforman las superficies plásticas, en situaciones argumentales diversas, para narrar historias fantásticas, en panoramas novedosos, todo ello sorprendente y gratificante, que invita a soñar, a participar, a adentrarse en la trama y ser parte de ella.
En 1989, la casa de la cultura de Colmenar Viejo, organiza una muestra colectiva e itinerante, que lleva parte de la obra de Van Drell, desde Colmenar a Madrid, en la Casa del Reloj, pasando por la exposición en la casa de la cultura de Alcorcón, de Pinto y otros lugares, bajo la denominación: TRANSFORMACIONES PLÁSTICAS.
En 1990, fue galardonado con el Premio Largo Caballero, como artista más destacado del entorno municipal de Colmenar Viejo, y en el mismo año, expone en la galería Decaso de Barcelona. A partir de ella, va a presentar las obras del pintor la marchante catalana Montse Plá (Estudi d'Art), llevando sus cuadros hasta New York y San Francisco, en California. Allí admira sus trabajos el director de Batik Internacional, que toma el relevo como marchante, presentando sus pinturas en Frankfurt, París y otras salas europeas.
En 1992, Inicia Van Drell la segunda parte o CONTINUIDAD del SURREALISMO ONÍRICO. Siete de sus obras: "el arbol y la gacela", "medallón gaélico", "sonata paleólitica", "fantasía floral", "canto de las iguanas", "músicos en el bosque", y "paloma atrapada", van a ir camino de New York, para ser expuestos en la sala de Broadway Stret. Allí cuenta Van Drell con una merecida fama; no hacía mucho había sido nombrado miembro de Honor, del San Francisco Museum of Contemporary Hispanic Art de San Francisco, y donde, una de sus obras: "el yin y el Yan", quedó expuesta, de forma permanente, en esta importante galería americana.
En aquella ocasión dijo, de su pintura, el conocido crítico de arte Ramón Oruyuela, director del museo: La pintura de Van Drell, es la expresión de un espíritu que unifica, con el mundo de color real, una imaginación y fantasía tan atrayente que, al contemplar sus cuadros, uno se encuentra entre luces, colores y paisajes de ensueño, donde las formas son viajeras de belleza insospechada. Esto y su técnica, hacen de este pintor un maestro del dibujo, del color y del empleo de la materia.
Vuelve Van Drell con sus obras a la sala Picasso, en 1993, que presenta, Fulgencio Argüelles, premio Azorín de novela, destacando en la última parte de su discurso la referencia que hace sobre Juan María, diciendo que está llena su pintura de savia mitológica, sueños de una mente genial, de una mano prodigiosa, que dibuja con la misma facilidad que piensa, que rebusca las raices de nuestro pasado ancestral, y las hace vivas.
Con motivo de las fiestas de Tres Cantos, ese mismo año, nuestro vecino ilustre, es nombrado "Pregonero" de las mismas, finalizando su alocución de esta manera: "Por orden del Señor alcalde, para que las mozas y mozos canten y bailen en gran contento". Fue jurado del primer y único certamen de cuentos, dando personalmente el premio a una niña que por entonces tenía ocho años. Van Drell guarda con mucho cariño, entre sus documentos, un dibujo que Paloma Engel, le envió como agradecimiento.
En 1994, con motivo del 40º Aniversario de su primera exposición individual en Sevilla, presentó su obra en la sala de exposiciones de la biblioteca municipal de Coria del Río, c/ Cervantes, desde el 15 de Junio al 2 de Julio, con nuevas pinturas del maestro del dibujo y del color, y al igual que los críticos presentes en el primer evento, ahora decían de su trabajo que continuaba su temática fantástica e imaginativa que caracterizan sus lienzos.
Pintura que refleja sus amplios conocimientos tanto de la teoría ortodoxa y experimental, como de las mixtas, pasando, como ya se ha dicho tantas veces, por el dominio del color y del dibujo, así como de la atmósfera, del ambiente, de la composición, y sobre todo un dominio de la materia, que Van Drell utiliza de forma muy personal, dando un tinte poético a sus obras.
Van Drell, da comienzo a su quinta época o del SURREALISMO A LA ABSTRACCIÓN, que le llevará hasta el año 2000. Expone en El Pico San Pedro, de Colmenar Viejo, más de una veintena de obras, la mayoría inéditas, que en esta ocasión no hablan de personajes mágicos, de lienzos a base de color, de materia en composiciones abstractas.
Es presentada, ese mismo año, una muestra, en la Galerie Herouet de Paris, de la mano de Batik Internacional Art, y en Septiembre otra en Magdalena Baixeras, Galería D´Art, obra de pura metamorfósis, cambio, mascarada, y juego. Son sus cuadros, referencia a sueños imposibles, espejos que se rompen, que paradójicamente, nos abren las puertas hacia todo aquello que no puede ser; es la realidad tras la realidad, es otra dimensión, somos nosotros mismos. Son sueños al que nos lleva Van Drell, que si no somos capaces de atraparlos a tiempo, inmediátamente se cierran, ya que solamente es nuestro en este momento de visión.
Dice Van Drell de su "canción de fragua": Esta pintura frma parte de una serie, que llevó a cabo sobre perspectivas constructivas metálicas, partiendo del efecto de luminosidad que produce detrás de una careta de soldadura eléctrica. Hay una similitud con la brillantez del hierro, cuando sale del crisol, o bien al golpearlo con el martillo sobre el yunque, que produce sensación de canto y luminosidad desde los primeros golpes, hasta los sordos y apagados que aparecen a medida que el hierro se va enfriando, tomando sonoridad y tintineo.
En 1966, es nombrado Miembro de Honor del Florida Museum of Hispania and Latin American Art, y queda una de sus obras expuestas, que el pintor titula "sueños cretenses".
La mayoría de los rostros que aparecen en sus cuadros, estan inspirados en la fisonomía de su mujer Angelita, y de miembros de su familia, tal es el caso de "muchaha de la cometa", rasgos tomados de su nieta Nuria o en "molinillos de papel", de su esposa.
En 1977, parte de su obra va a formar parte de la exposición colectiva, bajo el lema: "Artistas Plásticos", con motivo de la inaguración de la nueva Casa de la Cultura de Tres Cantos, y que se llevó a cabo, desde el 21 de Marzo al 13 de Abril. Este mismo año, realiza un cuadro, para el Memorial Antonio Osuna, primer edil del municipio madrileño.
En 1988, presentó en el Ateneo para la Cultura de Alcalá la Real, una muestra compuesta, básicamente, por tres grupos de mitologías de China, África y Mesoamérica, incluyéndose en la exposición, Cantos del Mar Egeo y Fábulas de la Vieja Europa. La elección de las mitologías, fue a partir de una idea, que luego se tomó en serio, documentándose en la materia. Así, la serie de mitos chinos, le vino al pintor, a través de la porcelana china, dice al respecto: "Me documenté sobre la religión de China, los siete inmortales, buscando una sensación de porcelana. Alrededor de ese dios de porcelana, nació todo el movimiento de las líneas que forman figuras parecidas a los animales del horóscopo chino: el murciélago, la paloma, el águila..... Luego me pareció muy interesante el arte del África ecuatorial, busqué las máscaras de los ídolos y desarrollé otra serie. Algo semejante ocurre con la de los dioses aztecas y mayas".
Continúa diciendo: "Siempre hay un centro en el cuadro, ese centro puede ser una máscara, como en los ídolos africanos, puede ser una porcelanita, como en los mitos chinos, puede ser una cabeza de dioses, como los incas. Las líneas giran alrededor de ese centro, y vuelven a él, de tal manera, que no dejan que el espectador aparte la vista de ese punto, manteniendolo dentro del cuadro".
A Van Drell, no le importa rectificar las veces que sean necesarias, hasta conseguir el efecto deseado, hasta que las líneas no esten correctamente colocadas, no pueden pasarse al lienzo. En él, desarrolla una técnica de composición mixta: Coloca cuerdas, cordones, pintura al óleo, acrílico, tintas vegetales, colas especiales, siendo todo un secreto profesional las fórmulas químicas que utiliza. Son las que dan la sensación de movimiento, de relieve y espiral, que el espectador, al fijarse muy de cerca, tiene la sensación de ver distintas texturas, conglomerados, y grosores .
En 1999, recibe junto al malogrado y querido, Juan Bartolomé Pinar, gran amigo del pintor y fundador del Grupo Literario "Encuentros", y al Director de la Casa de la Cultura, Luis Miguel Montero, el PREMIO DELTA 99 en reconocimiento a una trayectoria. Así mismo, es nombrado SOCIO PROTECTOR DE LA CASA DE CASTILLA Y LEÓN EN TRES CANTOS, y es homenajeado por la Asociación Aires de Asturias. Expone sus MITOS Y DIOSES, en la Sala Picasso de Colmenar Viejo y, este mismo año, es nombrado personaje ENCUENTROS 99.
El 3 de Marzo de 2000, se inaguró en la Casa de la Cultura de Tres Cantos, una nueva muestra del surrealismo de Van Drell, más en la linea objetiva de esta corriente artística, al plasmar en sus cuadros ambientes abstractos, oníricos, en los que la realidad se filtra a través de pequeños espacios circulares, que recuerdan a la desorientación reflexiva de Max Ernst, el gran pintor surrealista alemán con la captación de sensaciones inéditas.
El material del subconsciente se adueña del espectador, gracias al simbolismo de las cosas que da el surrealismo, que es así como lo define Van Drell. El paso del tiempo ha pulido esta abstracción hacia lo mágico, olvidándose de la concrección que, a veces, se hace del sentimiento que merma el sentido de lo que se quiere provocar, y la doble dimensión de la naturaleza. En esta exposición utiliza el artista tarracota cocida, pan de oro, etc., mezclándolas con pinceladas de su anterior etapa sobre mitología. Es una evolución del pintor que mira siempre más allá de lo que se ve en sus lienzos que denominó, en esta ocasión: PUEBLOS QUE SON Y QUE FUERON.
La relación de Van Drell con el municipio tricantino, tanto como vecino como artista, es intensa, interviene con asociaciones y colectivos de todo tipo, aportando su especial granito de arena a su historia, a través de concursos y certamenes culturales y regionales, a veces diseñando ambientes escenográficos para obras de teatro, ha sido premiada por su Ayuntamiento, dando, a la sala de exposiciones de la Casa de la Cultura, el nombre de "Van Drell": Pintor de sueños colores y mitos.
Con tal motivo, en la sala de su nombre va a acoger una exposición antológica del artista, que se realizó desde el 19 de Diciembre hasta el 20 de Enero de 2002. A partir de ella, decide Van Drell no trabajar tan inténsamente, cosa que transmite a sus representantes de Barcelona, debido fundamentalmente a su vista cansada que no le permite fijar la atención como quisiera desear.
Por otra lado, a principios de primavera de 2003, su equipo médico decide realizarle una angioplasia, a la que se somete Van Drell, presenciando en el monitor las imágenes del interior de sus arterias, con la curiosidad e imaginación que le son características.
Fruto de esta experiencia, de inmediato pone de nuevo en marcha su imaginación y surge la idea: Conmemorar el 50ª aniversario de su primera exposición individual de Sevilla, con la presentación, junto a otras obras del pintor, de ocho nuevos lienzos que bajo el título: "CORDIALIDADES", seran expuestas en la Sal Van Drell de Tres Cantos, a partir del 24 de Marzo de 2004. Estas obras son: "Abrazo cordial", "senderos vitales", "ritmos sutiles", "arborescencias", "las raices del ser", "vibración de libélulas".
No quisiera terminar mi trabajo sin resaltar algunas de las frases que han llamado la atención de los cronistas, en el tiempo de sus entrevistas, y que ponen de manifiesto la refelxión y profundidad interior del pintor: "Si no se conoce el dibujo, es imposible desdibujar". "Un artista, que no asume el lenguaje de su tiempo, es fácil que no se le entienda". "El cuadro se sostiene, si se ha dibujada de una forma sensata". "Surge una idea, a partir de ella, hay que docunmentarse. "Siempre hay un centro en mis cuadros, al que las líneas vuelven". "El artista necesita , a veces, que se le diga que es bueno". "El artista, nunca llega a su meta, siempre le queda algo por descubrir".
Su obra pictórica, parte perdida en el ya expuesto incendio en Barcelona, parte en manos de amigos y familiares, en salas de España, Europa y América, en manos de particulares, Instituciones etc. queda de algún modo reflejada, en las páginas siguientes, distribuidas algunas de sus obras, conforme a los periodos que el mismo Van Drell ha clasificado. Son los siguientes: Etapa inicial, con los primeros premios de pintura y dibujo, a partir de 1931. Primera época: Realismo costumbrista, de 1954, primera exposición en Sevilla a título individual, a 1979. Segunda época: Expresionismo, de 1980 a 1982. Tercera época: Onirismo fantástico, de 1982 a 1987. Cuarta época: Surrealismo onírico, de 1988 a 1993. Quinta época: Del surrealismo a la abstracción, desde 1995 a 2000. Sexta época: Reflexión y "cardialidades".
Su trayectoria artística fue admirada en las siguientes EXPOSICIONES: 1954.- Salón de Primavera, Sevilla. Sala Alarcón, Sevilla. 1956.- Asociación de Dibujantes. Barcelona. 1963.- Certamen de Pintura El Aaiún. Sáhara. 1964.- Fiestas del Aaiún, El Aaiún. Sáhara. 1965.- Concurso de Pintura Cabildo Provincial, El Aaiún. Sáhara. 1980.- Sala Aleixandre, Alcalá la Real. Jaén. Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Córdoba, Priego. Córdoba. Certamen nacional G. Morcillo, Granada. 1981.- Primer Certamen Nacional Cristóbal Ruiz, Villacarrillo. Jaén. Sala Lord Byron, San Celoní. Barcelona. Sala Aleixandre, Alcalá la Real. Jaén. 1982.- Galería de Arte 16, Madrid. Sala Aleixandre, Alcalá la Real. Jaén. Galería Ministerio de Cultura, Jaén. Certamen nacional de Martos. Sala Excelentísimo Ayuntamiento de Creixel, Creixel. 1983.- Primer Certamen nacional, Alcalá la Real. VI Encuentro de Arte, Colmenar Viejo. Madrid. 1984.- Sala Torres Begue, Madrid. Sala El Madroño, Tres Cantos. Madrid. Sala Picasso, Colmenar Viejo de Madrid. VII Encuentro de Arte, Colmenar Viejo. Madrid. 1985.- Colegio Julio Pinto, Tres Cantos de Madrid. 1986.- Sala Pictograma, Castellón. Colegio Julio Pinto, Tres Cantos. Madrid. Sala Aleixandre, Alcalá la Real. Jaén. VIII Encuentro de Arte, Colmenar Viejo. Madrid. Sala Picasso, Colmenar Viejo. Madrid. Caja de Ahorros de Manresa, Navarcles. Barcelona. 1987.- Sala Acar, Motril. Granada. Caja Madrid. Madrid. Casa de la Cultura, Tres Cantos. Madrid. Sala Picasso, Colmenar Viejo. Madrid. 1988.- Sala Picasso, Colmenar Viejo. Madrid. Sala Infantas. Madrid. Casa de la Cultura, Tres Cantos. Madrid. 1989.- Salón de Otoño. Madrid. Sala Tavern. Barcelona. Casa de la Cultura, Tres Cantos. Sala Picasso, Colmenar Viejo. Madrid. 1990.- Bar Fulcor, Tres Cantos. Madrid. Sala Decaso, Barcelona. 1991.- Casa de Andalucía. Tres Cantos. Madrid. Museo de Arte Hispano Contemporáneo, San Francisco. U.S.A. 1992.- Casa de la Cultura, Tres Cantos. Madrid. Montserrat Gallery, New York. U.S.A. Casa de Andalucía, Tres Cantos. Madrid. 1993.- "Andar" El Caminante. Barcelona. Montserrat Gallery. Barcelona. Sala Picasso, Colmenar Viejo, Madrid. 1994.- Sala Excelentísimo Ayuntamiento. Coria del Río. Sevilla. Galería Pilar Barrio. Tres Cantos. Madrid. 1995.- Museo de Arte Hispano Contemporáneo, San Francisco. U.S.A. Frankfurke Buchmesse, Frankfurk. Alemania. Sala Pico San Pedro, Colmenar Viejo. Madrid. 1996.- Artexpo. Barcelona. Galería Magdalena Baixeras. Barcelona. Museo Arte Hispánico, Miami. U.S.A. 1997.- Galerie Herouet, París. Francia. Casa de la Cultura, Tres Cantos. Madrid. 1998.- Ateneo para la Cultura, Alcalá la Real. Jaén. 1999.- Casa de la Cultura, Colmenar Viejo. Madrid. 2000.- Casa de la Cultura, Tres Cantos. Madrid. 2002.- Casa de la Cultura, Sala Van Drell, Tres Cantos. Madrid.
Por último, fruto de toda una vida dedicada a la pintura, fueron los siguientes GALARDONES: Prix de dessin "Le Caouson", Toulouse. Medaille d'or de peinture "Le Caouson", Touluse. Mención de Honor. Primer certamen Provincial del Sáhara. Premio Salón Primavera de Sevilla. Premio Certamen Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Córdoba. Primer premio de Pintura Gabriel Morcillo de Granada. Premio Certamen Excelentísimo Ayuntamiento de Martos. Jaén. Premio de Pintura Ayuntamiento de Villacarrillo. Medalla de oro Galería Aleixandre, Alcalá la Real. Premio Largo Caballero de Pintura, Colmenar Viejo. Miembro de Honor Museo de Arte Hispánico Contemporáneo de San Francisco, California. Vecino Ilustre y Pregonero de la ciudad de Tres Cantos.

1 comment:

ivigoles0 said...

tienes imágenes de los cuadros???